En la gestión de los recursos humanos, cada vez son más los aspectos que se trabajan para favorecer que el empleado esté a gusto en el trabajo y de lo máximo de si mismo. Y en una sociedad que tiene a sensación pasar cada vez más tiempo en su puesto, es muy importante que sienta que tiene beneficios y que forma parte del proyecto. Por eso, no es de extrañar que hablemos de jornadas flexibles o del salario emocional. ¿Pero qué es exactamente esto último?
Salario emocional del trabajador
Ya no solo hablamos de la retribución mensual o puntual que recibe una persona por el desempeño de una actividad y que supone un coste para la empresa. Ahora también se aplica el salario emocional, o lo que es lo mismo, incentivos no económicos que mejoran la motivación y el compromiso.
Uno de los aspectos más importantes, más allá del cumplimiento de los objetivos, es mantener la motivación de los empleados. Y es ahí donde este tipo de retribución toma su papel al aumentar la satisfacción laboral.
Beneficios de los incentivos
Sin duda, una de las ventajas de este salario motivacional es el equilibrio que transmite entre su función, la cuantía que recibe y su valoración como parte de la empresa. Por ende, supone un método de retención del talento muy útil que nos asegurará que el empleado no quiera cambiar de lugar de trabajo.
Además transmite la sensación de transparencia y el clima laboral será mucho más propicio para que todas las tareas se realicen de forma óptima entre los diferentes miembros del equipo. Ofrecer ventajas y beneficios es una manera de retener talento y no tiene por qué suponer un sobresfuerzo para la empresa, y será beneficioso para todos, convirtiendo a los trabajadores en prescriptores de su lugar de trabajo.
¿Qué aspectos se incluyen en la nómina no económica?
Dentro de esta retribución, se incluyen aspectos como el reconocimiento personal, la flexibilidad horaria o la carrera profesional dentro de la empresa. Y es que, la calidad de vida que nos ofrece un puesto, es hoy en día, un elemento para elegir el futuro laboral. Asimismo, las personas deben sentir que forman parte de las decisiones que se toman, permitiendo que sean creativos incitándoles a compartir las propuestas e iniciativas que consideren oportunas.
Por otra parte, para algunos trabajadores, puede parecer que el control horario es una limitación de su libertad. Sin embargo, este aspecto también se puede cambiar e incluir dentro del salario emocional ofreciendo mejoras. Por ejemplo, la posibilidad de fichar con el móvil en cualquier lugar, ofrece libertad y sobre todo confianza si esto favorece el teletrabajo.