Entre todas las funciones del departamento de recursos humanos, está el gestionar de la mejor forma en el talento de la empresa. Y, referente a ello, es imprescindible saber mantener un número de trabajadores en plantilla para que se vea reflejado favorablemente en la producción. Para medirlo, hay que calcular la tasa de rotación del personal.
¿Qué es la tasa de rotación del personal?
La tasa de rotación del personal o índice de rotación es un concepto que muestra la capacidad de la empresa para mantener a sus empleados de manera efectiva.
En esta métrica se incluyen todos los empleados que abandonan la empresa, ya sea por voluntad propia, por decisión de la compañía, o incluso por jubilación o fallecimiento.
La fórmula del índice de rotación
Con ella se pretende poner en relación a los trabajadores que abandonan la empresa y a la media de empleados durante cierto periodo de tiempo. Un periodo que, cuanto más amplio, más representativo será. Y el cómputo anual puede ser bastante adecuado.
Para calcularlo sería necesario sumar el número de empleados al inicio y el número de empleados al final y después dividirlo entre dos. Esa cifra será dividida por el número de empleados que abandonaron la empresa, y finalmente habrá que multiplicarlo por 100 para obtener el resultado en porcentaje.
Cómo interpretar la tasa de rotación
Todas las empresas, exceptuando algunas micropymes, irremediablemente tendrán que gestionar una rotación del personal. Incluso es necesario que exista esa rotación. Lo interesante es saber en qué porcentaje debe moverse la empresa valorando su tamaño, la tipología de la misma y, sobre todo, la industria o sector en que se encuentra.
Cada empresa requerirá de unas necesidades, pero podemos establecer unos estándares que, a nivel general, podrán servir de referencia para multitud de empresas.
Índice de rotación alto
Cuando el cálculo da un resultado superior al 10%, podríamos considerarlo superior a lo normal. Esto puede suponer una pérdida importante de la productividad en la empresa, ya que implicará una inversión de tiempo en la formación y la asimilación de los procesos en cada nuevo empleado. Este déficit en productividad puede tardar un año en recuperarse.
Además, a estos costes hay que añadir los referentes al departamento y a las tareas continuas de búsqueda de talento y selección de personal. Aunque, bien es cierto, la tecnología en los recursos humanos ha optimizado mucho todas sus gestiones.
Índice de rotación ideal
La tasa de rotación óptima en una empresa podría estar por debajo del 10 %. Esto reflejaría que hay actividad en búsqueda de los mejores perfiles pero que también se consigue retener a los más valiosos. De esta forma, se consiguen unos niveles de producción óptimos.
Índice de rotación escaso
Aquella tasa que se aproxima a una cifra nula, podría denotar estancamiento e inmobilismo en la empresa. Es decir, es posible que no se esté buscando un crecimiento ni tampoco nuevo talento. Suele ser común en negocios pequeños. En empresas más grandes sería un mayor motivo de preocupación.
Consejos para conseguir un índice de rotación óptimo
Como venimos viendo, comúnmente es más interesante mantener un alto porcentaje de la plantilla que renovarla continuamente. De esta manera, se aumente la productividad y se reducen los gastos en formación y en selección de personal. Por ello, es conveniente seguir unas recomendaciones:
- Mantener buenas condiciones para los empleados: un empleado que se encuentra cómodo por cómo es tratado, difícilmente querrá abandonar su sitio. Aquí influirán muchos factores, como el salario, el horario o la flexibilidad.
- Ofrecer planes de carrera: un aspecto clave es mostrar interés por el empleado a largo plazo. Por ello, es interesante mostrar posibilidades de crecer profesionalmente en la empresa, lo que además supondrá una estabilidad económica y laboral.
- Premiar en público: un empleado que se siente reconocido por el equipo es un empleado contento.
- Hacer partícipes a los empleados: también servirá hacerles ver que no son meras herramientas de paso, sino piezas importantes para un futuro de la empresa donde ellos serán protagonistas.
- Clima laboral: son muchas las horas a la semana que se comparten con los compañeros, aproximadamente un tercio de la mayoría de días. Por ello, sería nefasto estar incómodo con ellos.
- Conocer la tasa de rotación de cada sector y la propia: será difícil mejorar sobre lo que no se conoce su estado. Además, una referencia de empresas similares nos dará pistas sobre cómo estamos trabajando. A partir de ahí hay que tratar de optimizar.
- Acertar en la selección del personal: recordemos que en la tasa de rotación también se valoran las salidas por decisión de la empresa. Pero, si no nos equivocamos, seguiremos contando con esos empleados.
Este último punto no es tan sencillo. Conviene disponer de un experto equipo, contar con una empresa de selección de personal y reclutamiento, o tener alguno de los mejores softwares de recursos humanos. Como Control Laboral, donde disponemos de una herramienta integral de captación de talento, que abarca desde una solicitud del perfil exacto demandado hasta una evaluación de los candidatos finales elegidos.