Años después del inicio de su obligatoriedad, el conocimiento sobre el registro horario parece generalizado en España. No obstante, conviene conocer cómo es el registro de la jornada laboral en Europa, y analizar cuál puede ser el futuro de la normativa a nivel comunitario.
El registro horario en Europa
En 2019, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) sentenció que los Estados miembros debían imponer a las empresas la obligación de realizar un registro horario de la jornada. Y que hay que hacerlo con “un sistema objetivo, fiable y accesible que permita computar la jornada laboral diaria realizada por cada trabajador”.
De esta manera, se pretende alcanzar un contexto más justo entre empresas y trabajadores, valorando la duración de los descansos, sus jornadas, y la remuneración. Aunque conviene recordar que muchos países ya habían requerido el registro horario con anterioridad.
Hablamos de una norma genérica en la Unión Europea, pero cada Estado, como vamos a ver, puede marcar sus peculiaridades.
Diferencias del registro de la jornada laboral en Europa
Los requisitos e interpretaciones de algunos países son muy dispares, y lo comprobaremos con estos ejemplos. Además, cabe recordar que siempre pueden existir convenios y otros acuerdos que sean más exigentes en esta tarea.
Alemania
Es uno de los modelos más permisivos. Las empresas no están obligadas a realizar un control horario. Ni siquiera de las horas extras. Pero sí que están obligadas a registrarlas.
Bélgica
Parece que los belgas no se ciñen estrictamente a los dictámenes del TJUE. Sólo realizan el registro de jornada en el sector de la banca.
Francia
Se establecen controles para situaciones donde la jornada no se pueda calcular previamente, y se entrega un registro mensual al trabajador. Para jornadas convencionales, existe mayor libertad.
Italia
Es el registro de jornada más similar al español. Debe ser muy completo, realizando un control diario, e incluyendo vacaciones, ausencias, horas extras y todos los detalles posibles. Y se entrega a los trabajadores a final de mes. La gran diferencia es la excepción en los trabajos del hogar.
Portugal
También estamos ante un control horario estricto. Además, la empresa debe asegurarse de recibir en un plazo de 15 días los registros firmados por los empleados que trabajen fuera de las instalaciones.
Reino Unido
Lo incluimos como país cercano, pero cabe recordar que ya no es miembro de la Unión Europea tras el Brexit. Su ley de registro horario se centra en los límites de la jornada semanal, y ponen especial énfasis en los horarios de trabajo nocturno. Los registros deberán conservarse durante dos años.
El registro horario en España
En el Estatuto de los Trabajadores viene reflejada la obligación del registro horario. Y se detalla que “deberá incluir el horario concreto de inicio y finalización de la jornada de trabajo de cada persona trabajadora”. Un registro que deberá conservarse adecuadamente durante al menos cuatro años. Y, además, a los trabajadores a tiempo parcial se les deberá entregar una copia cada mes.
Nuevas obligaciones: registro horario digital
Las directrices comunitarias en materia de protección de datos afectan a las formas permitidas de llevar el registro horario. Y es que el Comité Europeo de Protección de Datos prohibió cualquier control de presencia biométrico para proteger los datos personales de la ciberdelincuencia. Consecuentemente, ya no es legal fichar con huella dactilar, con sistemas de reconocimiento facial, etc.
Además, en España, se ven las intenciones de Yolanda Díaz y su ministerio. Así, el registro horario digital será la única opción válida. Quedará vetado cualquier sistema analógico como el registro horario en papel.