Parecía una realidad que la reducción de la jornada laboral de 2024 en España se iba a aprobar en ese año. Desde el Ministerio de Trabajo se esforzaron para que fuera pronto y poder seguir con su hoja de ruta. Esta se iba a dividir en dos tramos, los cuales deberían materializarse para cumplir con los pactos de gobierno. Ahora, la reducción de jornada laboral está programada para 2025.
El pacto para la reducción de jornada
Para conocer el contexto y los inicios de esta medida es necesario hablar de política. La formación del nuevo Gobierno de España en 2023 necesitó de diferentes pactos y acuerdos. Pedro Sánchez no pudo ser investido como presidente sin el apoyo de, entre otros partidos, Sumar. Y esta formación, capitaneada por Yolanda Díaz, tuvo entre sus demandas la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas. Hubo investidura y ahora estas medidas deben salir adelante.
La reducción de jornada de Yolanda Díaz
La nueva jornada laboral será de 37,5 horas semanales. Siempre, sin merma salarial. Es decir, quienes trabajaran más de ese número de horas, pasarán a cobrar lo mismo trabajando menos tiempo.
Es necesario citar los convenios, ya que en muchos casos ya se contemplan jornadas completas de 37,5 horas o menos. Pero si no es el caso, esta reducción de jornada tendría unas consecuencias que vamos a citar seguidamente.
¿La reducción a quién afecta?
- Menos horas de trabajo para aquellos trabajadores que hicieran más de 37,5 horas.
- Los trabajadores que realizaban 37,5 horas al menos, pasarían a tener contratos de jornada completa.
- Los salarios se acomodarán tomando como referencia las horas de la jornada completa.
- Diferentes convenios pueden quedar condicionados.
El proceso para su implantación
Desde el inicio de 2024 se fueron produciendo diferentes reuniones con sindicatos y empresarios. Y ya en junio el Ministerio de Trabajo y Economía Social apretó al acelerador, anunciando reuniones semanales cada lunes. Las primeras medidas debían estar aprobadas antes de que acabe el verano, y para ello trabajaron intensamente.
Tardó en darse forma la ley, debido principalmente al desacuerdo de la patronal, que argumentaba una preocupante bajada de la productividad si se trabajan menos horas. Por otra parte, los sindicatos se alinean con el Gobierno y exigían aprobar la reducción de jornada de manera urgente. Finalmente, las empresas salieron de la mesa de negociación.
En estas reuniones también se trataron otros asuntos relacionados, y que tendrán repercusión inmediata en las empresas, como el método del registro de la jornada laboral que explicaremos más adelante.
¿Reducción de 37,5 horas o 38,5 horas?
El objetivo es el de fijar la jornada laboral en 37,5 horas semanales. Sin embargo, el Ministerio de Trabajo y Economía Social planteaba un paso intermedio. Un proceso paulatino con el que querían facilitar la adecuación de procesos a las empresas, y que se iba a reflejar en una jornada laboral de 38,5 horas semanales antes de que el verano de 2024 finalizará. Los retrasos en los acuerdos han provocado la eliminación de este paso intermedio.
Otras medidas relacionadas con la reducción de jornada
El Gobierno no va a conformarse con el establecimiento de una nueva jornada de trabajo. La reducción de la jornada va a ir acompaña de otras medidas. Y éstas, precisamente, actuarán para tratar de asegurar el cumplimiento de la reducción. A las que vamos a explicar, se ha unido posteriormente la desconexión digital.
Registro horario digital
La ministra y sus aliados quieren poder acceder en tiempo real, y de manera telemática, a ese registro de las jornadas. Y, para ello, va a ser obligatorio que las empresas cuenten con un control horario digital a través de una nueva ley de control horario. Quieren asegurar la veracidad de los registros y eliminar las posibles manipulaciones. Sin embargo, el registro horario digital ha quedado desvinculado de la reducción de jornada, y podrá ser aprobado de manera independiente y más ágil a través de un real decreto ley.
Endurecimiento de las sanciones
Las sanciones relacionadas pretenden ser aun más disuasorias que las que ya existían hasta ahora. Y ya se esperan dos importantes novedades:
– Sanciones por cada empleado: históricamente se aplicaba una única sanción, independientemente del número de los trabajadores con los que se cometiera la infracción. Ahora, el total será el sumatorio de cada sanción aplicada por cada empleado con el que se encuentre alguna irregularidad.
– Cuantía de las multas: las franjas sancionadoras han aumentado el importe. El máximo será de 2.000, 5.000 y 10.000 para infracciones de grado mínimo, medio y máximo respectivamente.
– Daños y perjuicios: aquellos casos en los que, por ejemplo, un exceso de jornada suponga un riesgo para la salud, aumentarán un nivel su gravedad. Pasarán de graves a muy graves. Y, consecuentemente, se elevará la sanción a la empresa infractora.
La reducción de jornada laboral de 2024, ¿entró en vigor?
Esa reducción y el resto de medidas no se aprobaron finalmente en 2024. Todavía es necesario estar pendiente sobre las novedades sobre la reducción de jornada, la cual debería entrar en vigor en 2025. Las empresas deben estar preparadas ante todas estas medidas de obligatorio cumplimiento que están terminando de concretar.